En los años 70, llegar a la universidad era casi una proeza para cualquier hijo o hija de familia humilde. Los estudios solían costar mucho dinero, y de hecho, no todos tenían la posibilidad de sacarse una carrera, algo que parecía asegurar un buen futuro laboral. Las cosas han cambiado mucho con el tiempo, aunque todavía hay países donde la universidad, lejos de ser lo habitual, es un privilegio. De hecho, en lugares como España, Francia o Reino Unido se ha dado una irónica situación, que ha llevado a muchos jóvenes a desesperarse: la sobrecualificación. Esto ocurre cuando una persona tiene más estudios de los que necesita para ocupar un puesto de trabajo, pero debe buscar empleo en sectores que no son el propio. El ejemplo más claro lo vemos en esos licenciados que trabajan en McDonalds o en cualquier otro restaurante de comida rápida. Con todos los respetos para esos empleos, hay gente con dos carreras y un master que solo está sirviendo patatas fritas.
Universitaria y escort, un perfil cada vez más común
Fecha de publicación: 5 octubre, 2023